Si pudieramos viajar en el tiempo, situándonos hace cien años y gestionáramos un concurso de ideas para visualizar como se vería Bogotá para el 2020, las propuestas distarían de la realidad del paisaje urbano que se vive hoy en la capital colombiana. Poco sabían en ese entonces de los sucesos que marcarían la historia más adelante, como lo fue el Bogotazo que llevó a rehacer o reformar la mayoría de edificios que eran referencias arquitectónicas de los siglos anteriores.
La incertidumbre de un futuro lejano es perpetua. Esto no impide al imaginario plasmar escenografías utópicas o distópicas de aquella dimensión urbana para el 2120. Este fue el objetivo principal del concurso de render gestionado por el Colectivo de Estudiantes de la Sociedad Colombiana de Arquitectos (CESCA) de la seccional Bogotá y Cundinamarca.
El concurso se planteó con libertad en el criterio de diseño de cada propuesta. Y una memoria debía complementar el relato que visualizaba el render.
Memoria enviada por los gestores del concurso: En medio de la incertidumbre y con el surgimiento de nuevos modos de habitar los espacios a causa de esta pandemia, surge el Concurso de Ideas Bogotá 2120, un ejercicio desarrollado en el marco de los talleres y encuentros virtuales que el CESCA ha realizado para el fortalecimiento del aprendizaje de su comunidad, incentivando a los estudiantes de arquitectura a la exploración creativa del futuro para Bogotá.
Bajo el pretexto de una propuesta expresada en una sola imagen y representada con herramientas digitales, se pretende que el participante explorara visiones utópicas y/o distópicas de la transformación de la ciudad a lo largo del tiempo. Conoce a continuación los detalles de las ideas ganadoras:
Primer puesto
Proyectista: Willian Steven Rivero Coronado, Estudiante de Universidad de la Salle
Técnica: Revit, Sketch Up, V-Ray, Lumion y Photoshop
“La tercera capital a mayor altitud en Suramérica a 2600 metros más cerca de las estrellas, una distopía fría de la insensatez de una urbe surgida de la sobreposición cultural nativa del lugar, sus prácticas y saberes opacados que conllevarán a la búsqueda de una identidad disuelta como resultado de un mestizaje internacional; en un futuro distante en el cual deberá coexistir lo mecánico con lo orgánico, la automatización de diferentes técnicas y labores, la disolución de lo tangible, una enfrascada lucha de conocimientos que favorezcan a la capital para ensordecer el ego de las masas.
En lo relativo a la construcción de ciudad, el caos y el orden asumen una dualidad donde los proyectos desentienden unas realidades sociales, no obstante, emprenden una hazaña mayor cuando elude al antropocentrismo por el acentrismo, asumiendo una realidad donde se comprende que la tierra seguirá después como lo estuvo antes de la existencia de nuestra especie, por lo que nos empeñaremos en coexistir con otros entes naturales, con la arquitectura orgánica, convertimos nuestros espacios comunes como la Plaza de toros en espacios polivalentes, llevaremos los retos físicos, escultóricos y creativos al hecho arquitectónico como expresión del momento histórico en el que habitan “2120”; además es una visión donde confluyen soluciones funcionales a necesidades existentes como lo es el transporte donde la ciencia va de la mano con el diseño para asumir estas deficiencias como los metros/trenes de levitación magnética o eléctricos, de la misma manera energéticamente la revolución de la energía eólica a través de la oscilación para obtener una resonancia aero elástica (vortex bladelees), la incorporación de políticas públicas que protejan el hábitat y contribuyan a una reinvención de nuestro patrimonio donde aporte al aprendizaje de nuestro territorio con el vacío universal, es decir, equipamientos reformados para su estudio, sin olvidar la estructura ecológica principal con espacios de recreación y producción como parques multifuncionales, edificios de agricultura vertical, cubiertas verdes; por último asumir desafíos estructurales como edificios en parábola que asuman una carga uniformemente distribuida.
En suma, una distopía donde para entender el orden se debe asumir su caos, como la felicidad sin sufrimiento, eso es Bogotá 2120, un hecho donde las buenas decisiones van de la mano de falacias.”
Segundo puesto
Proyectista: Ferley Molina Aley, Estudiante de Universidad La Gran Colombia
Técnica: Sketch Up, 3D Max y Photoshop
Glaucópolis
“En la noche del 30 de junio del año 2040, el distrito declaro alerta morada por los altos niveles de contaminación en la capital del país, según las estadísticas oficiales, la población residente supero los 20 millones de habitantes y toda la ecología urbana está al borde del colapso, las medidas adoptadas por la administración distrital ayudaran a mitigar la problemática, sin embargo, no son suficientes, expertos proponen la redistribución de la población urbana para aliviar la aglomeración en el centro del país.
Sin embargo 80 años después la ciudad sigue siendo un caos, construimos la última mega estructura ecosistémica de concreto con una gran superficie artificial, cilindros de purificación del aire y espacios triangulares a su alrededor, esto simulando una red habitacional, su estructura está a la vista y a modo de innovación decoramos su exterior, según los glaucotanos expertos, este es el futuro del urbanismo por lo tanto la ciudad dispersa dejo de ser una opción, toda la urbe está dividida en cilindros, hogares, oficinas y equipamientos, desde entonces sus habitantes viajan de cilindro en cilindro, mientras los glaucotanos estudian por más de 5 décadas para poder dar personalidad a cada cilindro.
No obstante disfruto del atardecer capitalino desde el monumento ata, pero no puedo evitar pensar en si hacemos lo correcto, como glaucotano les puedo decir que era una cuestión de vida o muerte, una cuestión de tiempo o mejor dicho de espacio, puesto que ya no éramos humanos, solo entes líquidos y cambiantes llenos de sevicia y ansias de poder, con un solo objetivo en nuestra corta vida, comprar el mejor cilindro de la ciudad e implantarlo en la torre como muestra de nuestros logros personales.
Por todas estas razones he llegado a la conclusión de que las ciudades y quienes las modelan hoy tienen glaucoma.”
Mención de honor
Proyectista: Sergio David Cortés Aya, Estudiante de Universidad Nacional de Colombia
Técnica: Sketch Up, Rhino, Photoshop, Illustrator y Lightroom
“Es una conversación visual sobre una ciudad como Bogotá con unas determinantes ambientales, sociales y culturales mestizas, en constante movimiento. Caracterizada por una estructura de ciudad ecléctica, hecha de mezclas de estilos y corrientes, generando una especie de palimpsesto combinando hechos naturales como el paisaje de los cerros orientales, y artificiales como el crecimiento formal e informal de la ciudad.
Las capas que interactúan en Bogotá hechas de diferentes épocas en constante dialogo en lenguajes desiguales, y ahora en un crecimiento vertiginoso, este crecimiento que ofrece soluciones variadas hacia la heterogeneidad y mestizaje de un futuro especulativo de crecimiento en palimpsesto, hacia una Bogotá aún más eclética.
Bogotá 2120 tendrá nuevas capas. Transportes nuevos que romperán el paisaje natural y urbano, estructuras entrelazas conectadas a través de la ciudad, la región y el país. Nuevos parques, parches verdes, paisajes de interacción natural y artificial. Arquitecturas inacabadas, regenerativas, generativas, caminantes, extrovertidas y definitiva- mente mestizas.
Este futuro especulativo será una época de inteligencias de enjambre, de comportamientos colectivos, de sistemas descentralizados, autos organizados, naturales o artificiales.”
